Ahora eres solo alguien que solía conocer, una persona que al verla por la calle no provoca mi mirada. Decias que fueramos amigos, pero hay que convencernos a nosotros mismos que eso no podia haber sucedido. Nos tratamos como dos extraños, cualquiera diria de esos tiempos, en los que estabamos juntos, en los que no nos podiamos separar, era hasta perjudicial. Sigo sin verle el sentido a todo aquello, porque un dia sucedio lo que sucedio. Pero tengo que admitir que estoy agradecida de que haya terminado.