domingo, 29 de abril de 2012
Hoy tengo ganas de comerme el mundo, aunque lo más probable es que mañana sea él el que me coma a mí. Quiero salir a la calle y gritar. Voy a romper todos los relojes que se me crucen por el camino y a esquivar todas las trampas que me ponga la vida. Voy a llorar a lágrima viva para poder apreciar las carcajadas que producen dolor de tripa. Pienso cazar cada oportunidad que me regale el camino por el que vaya y pienso aferrarme a mis sueños con las uñas. Y con esto, no me hace falta un pintalabios rojo para dejar huella cuando me coma el mundo yo solita.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario